Hace unos dos años, ya eras poeta en indignación completa, los tiempos te llevaron a que las letras se lanzasen en lineas afiladas contra esta sociedad mísera que anda escasa de verbo, aspirinas y certeza. La Casa de Zitas propuso juntar muchas palabras indignadas, y ahi tú estuviste. Se puso voz entre muchas personas a las que no la tienen, o sin rubor les han cortado la lengüa, la luz, y despiertan de sus cartones, cuando abre el cajero del Banco que les maldijo.
Hoy la Casa de Zitas, junto a Cartoneritaniñabonita, te dan la mano en forma de legajo, donde figuran tus palabras. Siguen siendo tan poderosas, como cuando las pusiste en papel, y en tropel, se manifiestan. Quieren recordar que ahí estuviste, junto a gente pequeña y grande, con tu acento propio en una manifestación de verso, que sigue vigente.
Nos seguiremos indignando, pues los cantares no se pueden callar, y la poesía perseguirá la justicia contigo, sin pereza mientras nos quede un rincón por barrer.
Gracias por tu escoba de esfuerzo.
-Ricardo Santa Bárbara-
Presentación autores indignados y libro
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